miércoles, 4 de julio de 2012

Es costumbre en las casas españolas.

En muchas casas españolas aún se practica la costumbre de mostrar las diferentes estancias a las personas que la visitan por primera vez. Esta es la cocina, se dice innecesariamente en la puerta de la misma, a las visitas. El cuarto del niño, la salita, el patio... Se trata de un recorrido que tiene mucho de puesta en escena familiar y que, una vez estrenada, suele repetirse como una función en cada nueva visita, en ocasiones mejorada y aumentada.
Me gustaría cumplir con esa costumbre en La Casa, preparando algún pequeño itinerario, puesto que dada la naturaleza temporal del soporte -el blog- los poemas han sido colocados en el mismo sin más orden que su fecha de nacimiento.
¿Y qué criterio usar? ¿Tema? ¿Tono? ¡Uf! Después de mucho pensar, y renunciar a agrupaciones artificiosas, prefiero unir los poemas guiada por el siguiente pensamiento: Una vez que has llegado a La Casa, ¿qué poemas te contaría, de viva voz, en la entrada? ¿cuáles junto a la cafetera? ¿en la ducha? En el patio, junto a la mata de fresas; en el sofá; en la azotea...

Pues ahí va la primera parada, en esta ocasión "En la alfombra de mi cuarto, con la espalda recostada en la madera de la cama".

Un sueño crecido.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/06/un-sueno-crecido.html 

Materia.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/06/materia.html 
Ensayo general.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/05/ensayo-general.html 

Morir de deseo.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/02/morir-de-deseo.html 
Como segunda parada propongo "El cielo abierto del patio enlosado", con poemas que miran afuera.

Nombres pronunciados y destinos.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/08/nombres-pronunciados-y-destinos.html  

Inspirar/Recuperar.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/06/mensaje-mi-jefa.html 

La casa contiene 2: El hombre en bicicleta
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/07/la-casa-contiene-1-y-2.html  
Júpiter y Venus bailan lento.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/03/no-saben-jupiter-y-venus-que-sulento.html 



En "El trastero", desde lo más interior, un lugar para esconderse.
¡Adiós, ladrones, adiós!
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/12/adios-ladrones-adios.html
En el fondo
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/11/en-el-fondo.html
y Navidad
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/12/navidad.html

En "La azotea", donde puedes gritar, si lo necesitas.

Árbol genealógico.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/08/arbol-genealogico.html
Me vendo a trozos cada mañana.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2012/06/me-vendo-trozos-cada-manana.html


A veces no me parezco.
http://angilafiera.blogspot.com.es/2011/09/veces-no-me-parezco.html


sábado, 30 de junio de 2012

Materia.




Que por qué no eres de azúcar,
y te fundes,
                                o te caes,
o le prestas a mi dedo
tu blanco
para hacer un dibujo en la mesa,
o te disuelves
en mi boca,
te digo.

martes, 19 de junio de 2012

Hastío/Esperanza/Nostalgia

La ciudad es una nuez
por la que camina un hombre cansado.


A veces él trepa por una grieta
y mira lejos.
Echa de menos aquel momento 
en que pudo volar con las palomas.


Nostalgia 
de lo que quiso y no sucedió.







viernes, 15 de junio de 2012

Un sueño crecido.




Mira ese árbol,
los trozos de cielo 
entre sus hojas.

Cuando el viento las mueve,
ese árbol es casi un mar,
un verano cumplido.
Y cuando ruedan por el suelo
imitan con su barullo
la retirada de las olas.

Ese árbol es un sueño olvidado
que ha crecido hacia fuera.

miércoles, 13 de junio de 2012

Me vendo a trozos cada mañana.




Ocasión.
La puerta abierta, el motor encendido…
¡El coche del tapicero!
El animal salta dentro del coche,
acelera, prueba el altavoz:
…Nunca más vendrá a su puerta
a tapizar butacas, tresillos
y descalzadoras
…Ahora es La Fiera,
ladrona de coches y negocios,
quien aúlla su propia mercancía:

Prueba número uno:
¡Nubes negras en frascos cerrados!
Tormentas de sal sucia
vendo, vendo –gruñido-

Prueba número dos:
¡Sangre, sangre negra!
¡Cachitos de pantera!
-Aullido- 
Me vendo
a trozos cada mañana.

Prueba número tres:
Sílabas de carbón,
miradas de hierro,
piernas sangrando metales pesados
–la uña desgarra la pintura del coche
y el altavoz envía el chirrido a través de las persianas
a las cocinas de las mujeres de su casa-

Lo mejor de La Fiera
muy barato, vendo.
Y mañana más.

jueves, 7 de junio de 2012

Inspirar/recuperar.

































Voy tarde.

Escandalosa
madreselva
me retiene
en este más acá
de la valla.
Aunque mire el reloj,
ya no conjugo
con propiedad.

Hacia dónde caminaba yo,
mañana sin nubes,
con luna.
Sigo capturada

por las voces mudas
de la enredadera,

aroma que se desvanece
si doy un paso.

Inspiro
y recupero
mi espíritu
traslúcido
perdido
entre colegio y verano.
Inspirar,
recuperar.
La noche ha sido muy corta.

Ya voy,
es igual,
enseguida
también será tarde.
                                  (Mensaje a mi jefa)

domingo, 3 de junio de 2012

En la puerta del banco.



08’25. Señora, usted y yo hemos llegado pronto.

08’26. Es fea la vida, me dice sin más.
(La  vida parece un objeto que usted se saca del monedero. Un objeto gastado y pequeño que la ha decepcionado, como ese regalo de boda que resultó ser un jarrón o un cuadro horrible).


08:30. La vida sigue ahí  sostenida entre usted y yo.
(Delante de las puertas que aún no se abren, en ese segundo en que sus párpados marrones no pueden seguir cerrados, ni su boca casi transparente puede evitar una mueca como la que se hace cuando nota que ese olor  viene de la mierda que ha pisado usted misma en la calle).


08:32. ¿Y si estuviera  mirando a la muerte?
(Intento saber hacia qué parte de la vida está mirando cuando suelta ese adjetivo tan breve, usted que ha vivido tan largo y tan conforme. Mujer de su casa, de sus hijos, de su marido, de su iglesia, de su camino diario hasta el mercado).


08.33. El empleado calvo espera iluminado por los focos.
(Él nunca le sonreiría a nadie si no fuera necesario, y menos a usted, señora que aprieta el monedero vacío bajo el pecho camino de la caja, ¿avergonzada?).


08.34. Oiga, le digo sin voz, hágase cargo: Mire lo que ha dejado en mis brazos, huérfana, agonizando como siempre, una cosa fea que yo no quiero llevarme a casa.


08.35. Usted cierra el monedero, y casi sonriendo, desaparece.